En Origen Certificado estamos volcados en incrementar la competitividad de las empresas españolas mediante la certificación del origen de fabricación; convertirnos en una referencia internacional en este campo es nuestro mayor objetivo. Para ello, guiados siempre por nuestro compromiso hacia la eficiencia y equidad trabajamos con varios sistemas de requisitos que, aun aportando cada uno de ellos su propio proceso de certificación, comparten una serie de conceptos básicos, lo que permite simplificar el mensaje y los conceptos sobre los que se asientan cada uno de los procesos de evaluación, haciéndolo también más comprensible.
Así, se pueden clasificar los distintos tipos de empresas presentes en los distintos sectores industriales, con el propósito de realizar un análisis y control exhaustivo y personalizado de la estructura y composición de cada una, y de las diferentes etapas que componen su proceso productivo, verificando el origen español de sus procesos de fabricación, y la trazabilidad de los diferentes componentes y materias primas que los componen.
El sistema de requisitos se halla dividido en dos partes: la primera, dirigida a las empresas propietarias de los productos a certificar, y la segunda, valorada en puntos, centrada en el proceso productivo, la parte más compleja e importante de la evaluación. De esta manera, se crea una herramienta de garantía única donde el resultado de las ponderaciones refleja el trabajo y la realidad de las empresas españolas.
No obstante, es necesario aclarar que el sistema de requisitos no es el proceso de certificación en sí. Ahora bien, sirve como base para estructurar correctamente los criterios generales de los que se nutre. ¿Quieres ver los criterios que se miden en el proceso de auditoría? Pincha aquí
Tipología de empresas
Como decíamos, en OC distinguimos cinco tipos de empresas. Esto se traduce en cinco variaciones del sistema de requisitos:
- Empresas del sector industrial general: en este apartado se encuentran todas aquellas empresas dedicadas a la fabricación o producción de cualquier tipo de producto, y que no pertenezca a los sectores y/o tipologías definidas en los puntos posteriores. Asimismo, para mayor rigor en Origen Certificado hacemos la siguiente clasificación: empresas de manufactura (el producto surge de la transformación o unión de materias primas) y empresas de ensamblaje (el producto se fabrica a través del ensamblaje de distintos componentes).
- Empresas del sector agroalimentario: debido a las particularidades de este sector, es necesario que se rija bajo un sistema de requisitos específico, aunque siempre manteniendo los mismos criterios de certificación y la exhaustividad que nos caracteriza. Para ello, se distinguen tres tipologías de materia prima: en estado natural, semielaborada o transformada.
- Empresas del sector textil: los procesos y actores que forman parte de la elaboración de un producto textil son múltiples. Por eso, es necesario un sistema propio que garanticen el absoluto cumplimiento en cada una de las etapas de la fabricación. Además, para mayor precisión se consideran dos fases dentro de la cadena de producción: fabricación de tejidos y la industria de la confección y tejidos de punto.
- Empresas del sector imprenta y serigrafía industrial: la necesidad de incluir una norma específica que comparta la misma estructura que el método de evaluación general de OEC, reside en que no se puede certificar la impresión como un producto, sino como un servicio. Pese a esto, los servicios de impresión guardan relación con un proceso productivo, por lo que la validez del sello se mantiene.
- Fábricas sin marca propia: los talleres dedicados a la fabricación de otras marcas no pueden regirse bajo la certificación de producto. En este caso y de manera excepcional son evaluados bajo los mismos criterios citados, pero obtendrán una certificación de fábrica. Para ello, se han incluido una serie de subrequisitos que permiten controlar con la misma rigurosidad la producción de estos fabricantes.
- Otras empresas: en el mercado existen compañías que, dado su sector, no se les pueden aplicar todos los requisitos de producción de OC. En consecuencia, se restan de la puntuación global aquellos puntos del criterio que no se está teniendo en cuenta. De este modo, la empresa obtiene un porcentaje de cumplimiento frente a la nueva puntuación global.
Si eres una empresa que fabrica en España y quieres que acreditemos la procedencia de tus productos, no dudes en contactar con nosotros. Apuesta por la certificación OEC y por el fortalecimiento del sector productivo español.